Varios medios de comunicación independientes y voces independientes se han alzado para denunciar la toma de rehenes de los guineoecuatorianos por un sistema guiado por el partido en el poder. Según las investigaciones de una red de periodistas africanos, es hora de que la comunidad internacional asuma sus responsabilidades para ayudar a este pueblo que lleva sufriendo varias décadas.
El PDGE aplica la política de mantener a la población en la miseria para utilizarla mejor. A falta de trabajo, dinero y vivienda, los habitantes de Guinea Ecuatorial se ven obligados a estar a merced del partido en el poder para sobrevivir. Los funcionarios del partido distribuyen dinero en efectivo para marcar su presencia en las ceremonias.
Esta estrategia, que no es más que corrupción, anuncia las próximas elecciones. Sin dinero, el PDGE carece de partidarios. Los guineanos están cansados, anhelan un cambio, pero son amenazados de muerte cuando intentan denunciar la miseria en la que viven.
El PDGE es, por tanto, un partido que opera con el dinero de los contribuyentes. El partido del Presidente no puede celebrar con éxito ningún acto sin dinero. Es un partido que es rechazado por el pueblo.
Continuará…