Cuando sale de su casa, al Embajador Oyono Ndong Mifumu le es habitual sentarse en el bar «Tabac des Ternes«, a pocos metros de su casa para consumir 1 y luego 2 y 3 vasos de alcohol; para así calmar el dolor de estar lejos de Guinea Ecuatorial ,solo en el extranjero, en un país donde se comporta diplomáticamente como un elefante en una tienda de porcelana;tras haber empinado mucho el codo y perturbado por los efectos del alcohol, dijo en un día de estos que, «estaba contento que Francia no haya perseguido a Teodorin sobre la reventa del inmueble de los bienes mal adquiridos de la Avenida Foch de París y cambiar la sentencia de pena de prisión suspendida en prisión en firme«.