Abdel-Latif Boureima
En un contexto de subida de los precios del crudo apoyada por el aumento de la demanda, las compañías petroleras quieren aprovechar los precios del petróleo para desprenderse de algunos de sus activos considerados envejecidos y/o no estratégicos.
El productor estadounidense Chevron quiere desprenderse de sus intereses en tres yacimientos productores de Guinea Ecuatorial. Se trata del yacimiento petrolífero de Aseng, el yacimiento de gas de Yolanda, en el bloque 1, en el que la empresa controla el 38%, y el yacimiento de gas y condensado de Alen, en el bloque O, donde tiene una participación del 45%.
Según un informe anual publicado por la empresa en 2020, la explotación de estos yacimientos le ha permitido añadir a su producción unos 441.000 millones de pies cúbicos de gas natural. Fuentes cercanas a la empresa revelaron que Chevron había contratado al banco de inversión Jefferies para llevar a cabo el proceso de venta.
La empresa había reforzado su presencia en Guinea Ecuatorial en diciembre con la firma de un acuerdo de reparto de la producción de un bloque marino en la cuenca de Douala.
La decisión de Chevron de vender sus activos en Guinea Ecuatorial se produce en un momento en el que la empresa está centrando sus actividades en la producción de petróleo de esquisto, sobre todo en la cuenca del Pérmico en Estados Unidos y también en Kazajistán. Son áreas de producción que la empresa considera económicamente más rentables.
Agencia Ecofin