El abogado guineoecuatoriano Ponciano Mbomio Nvó espera que en las próximas semanas se haga pública una acusación formal en relación con su cliente, el dibujante Ramón Ebalé, en prisión desde septiembre.
“Esta en prisión desde el 16 de septiembre y no sabemos de que está acusado”, afirmó a Lusa Ponciano Nvó, que se queja “de la arbitrariedad” del sistema judicial del país.
Según el abogado, el dibujante habría sido detenido por sospecha de blanqueo de capitales y “otros delitos financieros”, que no son más que un “pretexto del régimen” porque es una persona crítica con el gobierno de Teodoro Obiang Nguema, en el poder desde 1979, al frente de uno de los países más cerrados del mundo y sospechoso de violar los derechos humanos.
“Es muy difícil hablar con él y enterarse de qué se le acusa”, ha afirmado el abogado, conocido por defender a presos de conciencia o prisioneros políticos en el país.
“Ellos (el gobierno) utilizan la justicia a su favor, para perseguir a sus oponentes” afirmó.
Al vivir en el extranjero, Ramón Ebalé ha sido un importante crítico del régimen de Guinea Ecuatorial, publicando un trabajo gráfico contestatario que denuncia los abusos del régimen de Teodoro Obiang.
En septiembre, el dibujante se trasladó a su país natal para gestionar la renovación de documentos y fue detenido por las autoridades.
“Esto es habitual, detienen a la gente con sospechas inventadas para presionarlas y amedrentarlas”, dice Ponciano Nvó.
Pese a estar en prisión, el abogado explicó que su cliente continua “animado” y “no ha cambiado de opinión” respecto al gobierno de Guinea Ecuatorial, excusándose de dar más detalles por razones de sigilo profesional.
Ahora, explicó, es necesario que la fiscalía general de la República presente una acusación formal de modo que la defensa pueda, a su vez, presentar sus argumentos.
“Desgraciadamente, no sé cuando va a hacerlo, espero que sea pronto”, dice.
El sábado, una veintena de oenegés internacionales publicaron una carta dirigida al presidente de Guinea Ecuatorial para pedir su “inmediata e incondicional liberación” de Ebalé, que podría ser acusado de falsificación y blanqueo de dinero.
Para las oenegés, estas acusaciones “no son más que pretextos para justificar la continua arbitrariedad de la privación de libertad a la que está sometido”.
Aunque la legislación en Guinea Ecuatorial prevé que se presenten acusaciones en las 72 horas posteriores a la detención, Ebalé, que está en la cárcel de Black Beach, no ha sido acusado de nada y no hay información alguna de que haya habido orden de prolongar su detención por parte de algún juez.
En la carta, las organizaciones recuerdan que Guinea Ecuatorial empezará en enero a formar parte del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y que “el mundo está siguiendo muy de cerca” el caso de Esono Ebalé, por lo que las oenegés esperan que el gobierno “al ocupar una posición tan destacada en el escenario mundial” respete los derechos humanos, incluido el derecho de expresión”.
La carta fue enviada por la oenegé EG Justice, fundada por el abogado de Guinea Ecuatorial pro-derechos humanos Tutu Alicante,y ha sido suscrita por cerca de 20 oenegés, entre ellas Amnistía Internacional (AI), Human Rights Watch (HRW) y la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH).
Guinea Ecuatorial forma parte de la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa (CPLP) desde julio de 2014.
Lusa
No habrá ningún cargo justificado contra Ramón, cualquiera que hay sera por manipulación a los estamentos judiciales como es habitual en G.E.
El año Judicial está para cerrarse en Guinea Ecuatorial, lo que implica que el pobre Ramón tendrá que aguantar la maldita cárcel hasta Febrero 2018 sin acusación alguna.
LA COMUNIDAD INTERNACIONAL SOLO HABLA, NO HACE NADA PARA CAMBIAR LA ACTITUD DE LOS GOBERNANTES DE GUINEA ECUATORIAL.
Un dirigente depredador de los Derechos Humanos, y por ende, de las normas internacionales de la O.N.U, no debería gozarse de la misma inmunidad de que se gozan los líderes democráticos, la Comunidad Internacional debe tenerlo encuenta.