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    «On vous connait», los cobardes del régimen del rey de Akoakam

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    Por José Eugenio Nsue.

    Patience Dabany (Patience Marie Josephine Kama Dabany, 1941; cantante gabonesa y ex esposa del difunto presidente de Gabón, Omar Bongo, entre 1967 y 1987), tiene en su repertorio una canción titulada: «On vous connaît», que se podría traducir como: ‘se os conocen’ u ‘os conocemos’. Este título de la canción de Patience Dabany puede servirnos para describir la cobardía que les ha caracterizado a la persona del rey de Akoakam, de toda su familia y de sus lacayos a lo largo de todas sus vidas.

    El rey Obiang Nguema I es uno de los cobardes más afortunados y agradecidos del mundo; no es capaz de enfrentarse contra nadie pero en cambio lleva en el poder más de 50 años; 11 como adjunto y colaborador necesario en la cruel dictadura de su tío Mesie Nguema Biyogo, el único presidente elegido democráticamente en la República de Guinea Ecuatorial, y 40 años como rey absolutista de Kalunga, Akoakam; su táctica ha sido siempre la de los verdaderos cobardes de tirar la piedra y esconder la mano y la de aplicar el principio de ‘ la mejor defensa es atacando’. Al no poder enfrentarse ni codearse con los egregios y verdaderos hijos de la República de Guinea Ecuatorial, ha ido eliminándolos camaleónicamente uno por uno a lo largo de su longeva vida hasta quedarse como el único gallo del coral de la granja de coto privado que se ha convertido el país y rodearse de otros gallinas que van pavoneándose a su alrededor cantándole como el afeminado Francisco Pascual Obama Asue, y echándole flores como las doncellas que perfuman a los galanes para que esos se fijen en ellas y puedan elegirlas para copular. Esa misma actitud de cobardía es la que ha inculcado al mal llamado ejército de Guinea Ecuatorial donde para encontrar un soldado de verdad profesional es tan difícil como encontrar una aguja en un pajar.

    Este sujeto se ha atribuido a sí mismo los máximos rangos militares como el de ¡¡capitán general!! sin haber asistido en ningún curso de reciclaje en una escuela superior militar ni haber hecho ningún mérito ya no digamos participar en ninguna guerra, y ha osado en regalarle rangos militares a toda su extensa familia de inútiles; todos los hermanos del rey Obiang, todos sus primos, hijos, sus cuñados son militares de altos rangos y nadie sabe en qué academias estuvieron, qué estudios hicieron pero todos son altos rangos del ejército guineoecuatoriano. El que menos rango tiene de esa saga de Nguema Eneme es de Teniente Coronel (la naturaleza es sabia; ¡cómo tuvo tanta visión el patriarca Nguema Eneme de mandar a toda su prole a las academias militares para que salieran militares y de mando, no reclutas!); algún que otro hermano cuya profesión de toda la vida había sido ‘cazador’ o ‘trampero’ además de analfabeto, ha llegado a ser general del ejército.

    Pero todos son tan cobardes y miedicas y actúan como tales en todo momento. Su bravuconería sólo se ve frente a los inocentes e inofensivos ciudadanos a los que atacan por la espalda; ante los taxistas, jóvenes, activistas, opositores, mujeres vendedoras de los mercados, la población en general ahí son de gatillo fácil; además son tan cobardes que atacan en manada como hienas o contratando a sicarios para ir eliminando a los que les incomodan. Pero cuando se presenta un peligro como en el 3 de agosto de 1979, el primer cobarde y cagado, el rey de Akoakam se sube en un helicóptero y huye a Gabón; cuando se presentan los malhechores terroristas de Boko Haram para ir a cobrar por los servicios prestados al régimen entrando hasta la mismísima presidencia o en un banco de Bata a plena luz del día, todos esos generales y oficiales se meten debajo de las camas o se camuflan entre los árboles como camaleones convirtiéndose en vegetales para no ser vistos.

    Llevamos más de una semana leyendo en toda la prensa, Jeune Afrique, toda la prensa camerunesa y viendo las imágenes de cómo el ejército camerunés se ha movilizado y plantado casi en el territorio guineano en la frontera en una actitud hostil y beligerante con la excusa de querer evitar una hipotética construcción de un muro de separación por parte de la familia real de Akoakam en la frontera con ese país; un muro de vergüenza que sólo cabe en mentes torcidas y en personas paranoicas como los que nos mal gobiernan porque toda Guinea Ecuatorial vive gracias a los productos de primera necesidad que compra en Camerún; desde hace siglos los pueblos limítrofes entre los dos países Camerún y Guinea Ecuatorial tienen familiares en ambas partes, tienen fincas en ambos lados, se han llevado siempre bien, nunca había habido ningún conflicto importante entre los habitantes de los dos países; ¿por qué y para qué construir un muro de separación? ¿A quién le beneficia la construcción de un muro en la frontera con Camerún: a los guineanos o a la familia real de Akoakam? ¿A quién consultó o informó el monarca: al Parlamento monocolor, al Senado igualmente monocolor que controla íntegramente el gubernamental PDGE; o es otra estrafalaria y rocambolesca ocurrencia como fue la construcción de una ciudad fantasma como Oyala – Djibló cuyo presupuesto, si es que lo hubo, no consta en ningún Presupuesto General del Estado? ¿Por qué esos humanoides de la monarquía de Akoakam no quieren al menos disimular un poco y fingir ser, por un momento, demócratas consultando e informando a los órganos constitucionales que ellos mismos controlan vergonzosamente? ¿Dónde está el panafricanismo que tanto alardea el rey Obiang Nguema I cuando, como Trump, intenta construir un muro que divida a dos pueblos hermanos africanos de toda la vida?

    Ahora bien, ya que Camerún está moviendo fichas y haciendo abiertamente declaraciones de intenciones con su acercamiento al ejército en la frontera en Kie Osi, ¿ qué dicen nuestro rey-padre, capitán general, y el príncipe-heredero, encargado de la defensa y seguridad de su familia real, el general de división de las Fuerzas Armadas Terrestres a sus subordinados y súbditos o se creen que no nos deben ninguna explicación y como afirman los medios de (in)comunicación pedegistas de que su rey es un dios y como tal ningún humano puede luchar contra él?

    Algunos tenemos la impresión de que, a la hora de la verdad, en cuanto escuche el primer cañonazo o vea realmente las primeras escaramuzas, toda esa banda de cobardicas y miedicas se escapará despavoridamente; la familia real en sus aviones, si les da tiempo, mientras que los colaboradores se echarán a la mar o al bosque porque lo cierto es que ninguno de los que ahora se hacen llamar generales y militares en el país es apto para ejercer de militar. Ya lo dijo una vez un simple gendarme camerunés cuando junto con unos compañeros cruzaron la frontera y se presentaron en el entonces Destacamento de ¿Mbedumu? encontrando que los militares guineanos se habían huido abandonando el puesto de guardia: «ME VÁ BUINE NÀ BIZIMA BINE A PAÑÁ, NDE BĂH A NANÀ MEWEÑ» (Yo pensaba que había militares en Guinea (Pañà), con que unos calzonazos). On vous connaît.

    Así lo pienso y así lo digo; ¿ qué os parece?

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