Por José Eugenio Nsue
La última vez que pisé la tierra que me vio nacer allá en agosto de 1997, viví una escena que confirmaba lo que se sabía y pensaba todo el mundo. Entonces era el primer Ministro, Ángel Serafín SERICHE DOUGAN. Nos encontrábamos en un bar del populacho barrio de Mondoasi (Bata); él salía del aeropuerto, a su paso por donde estábamos, llevaba una caravana de vehículos militares y una sirena potente típica de sus habituales parafernalias; en el bar que estaba abarrotado, había entre los clientes muchos militares uniformados y armados, algunos oficiales de rango superior a juzgar por la indumentaria y los galones que lucían, ingiriendo alcohol como posesos. La camarera, guapísima por cierto, llamó por su nombre al que mandaba y le dijo que qué es lo que hacía tomando y no salía a recibir al Primer Ministro a lo que ese, ni corto ni perezoso, dijo alto y claro: ¿qué has dicho, que vaya a recibir a un bubi? Estás loca. Ella insistía: ¡si es el Primer Ministro! El oficial remató: lo será en su casa, pero no en este país. Todos los presentes, menos yo que le miraba atónito y alucinado, se partían de la risa y asentían con las cabezas aquellas necias y estúpidas palabras de aquel sujeto, pese a que era y sigue siendo la realidad que se vive en este país de los Obiang. Ningún bubi, annobonés, Ndowé, bisio o fernandino (BILOP) que ostenta un cargo, tiene autoridad ni manda sobre los fang; puede ser Vicepresidente, Primer Ministro, Presidente de la cámara…, de la misma forma, ningún fang de otro distrito con cargos es respetado por nadie de Mongomo tan insignificante que fuese, no pinta nada; los de Mongomo con cargos, no son nadie frente a la familia y parientes de Obiang, son los putos amos, todos los guineanos están a su servicio.
Lo lamentable es que todos lo saben; los bubis, annoboneses, combes… saben que les toman el pelo cuando les nombran Ministros, Presidentes de las cámaras o cualquier otra cosa. Los fang no de Mongomo saben al igual que las otras etnias, que no pintan tampoco nada solo hacen sus bravuconadas y fanfarronean con los más débiles y con los suyos; cantan la famosa canción del Coro Mixto de Malabo : MA TERE AÑONG N’GAB DJAM (algo así como: ‘aprovecho para coger mi parte’). Todos saben que Obiang, las esposas (sobre todo la Primera en todo), los hijos (sobre todo el heredero), los hermanos, primos, sobrinos y cuñados, son los dueños y señores del país y propietarios de todo cuanto contiene; están exentos de cualquier obligación y deber. Ils sont au dessu de la mélée (Mobutu).
Después de todo el ruido y esperpento que los Obiang han montado desde que cesó o cesaron el Gobierno que habían formado año y meses antes, el moribundo dictador reconoció públicamente que el país estaba al borde de la quiebra, la administración en la ruina; situación que venía dándose durante los 45 años que llevan mandando; en la disolución del Gobierno alegó que sus miembros eran incompetentes y corruptos, habían sido incapaces de aplicar el programa del partido con el que habían ganado las elecciones. Resulta que vuelven a nombrar prácticamente a los mismísimos, lo que sabíamos todos que iba a ocurrir; entonces, ¿a qué venía tanta bulla? ¿Quién puede creer que los únicos incompetentes, inútiles, corruptos que impedían que se cumpla el programa del PDGE y que el país fuera a la ruina son Manuela ROKA BOTEY, Ángel MESIE MIBUY, Alejandro EVUNA OWONO, Fortunato OFA MBO o Gabriel MBEGA OBIANG LIMA, entre otros y por eso salen del Gobierno?
Lo que ha quedado más claro como el agua, es que se trataba de un plan, la entronización definitiva del heredero de la corona, Teodoro NGUEMA OBIANG, que ya venía ejerciendo de rey de facto y hacerse con el control total y absoluto de la Administración y el Gobierno. Para ello, han purgado, limpiado, eliminado o silenciado todas las voces y presencia de todos los que le podían resultar un incordio. Así, se ha deshecho por fin de Alejandro EVUNA OWONO, que ha sido el amuleto del padre, conoce todos los secretos y entresijos de Obiang; a Ángel MESIE, otro servil y leal a Obiang – padre, le han conmutado por el camaleónico e incombustible Jerónimo OSA OSA, un incondicional, adulador y palmero del tandem Madre – Hijo, Constancia – Teodorín, los dos cubren la cuota de los serviles de Micomiseng. El caso más llamativo ha sido la expulsión fulminante y ¿definitiva? del hermanastro y posiblemente el único hijo con una formación sólida de toda la familia, Gabriel MBEGA OBIANG LIMA. En febrero del pasado año, primero le despojó de la parte de herencia que le dio su padre, el petróleo y las minas; ahora le ha echado de la hacienda de su padre, posiblemente le tendría en el arresto domiciliario actualmente sin posibilidad para viajar sin su permiso como hizo con el otro hermanastro, Ruslán; lo que demuestra que Obiang – padre está prácticamente desahuciado; falta que nos digan la fecha de su entierro suponiendo que los que se han hecho con la poltrona, tengan a bien darle sepultura y organizarle unos funerales a la altura de lo que ha sido y hecho por ellos; pero me temo que con lo que se está viendo, cómo un solo hijo y su madre están eliminando, apartando y discriminando al resto de la familia, a los tíos paternos, sobrinos y todos (algunos) de los que han colaborado y contribuido para que permaneciera tanto tiempo en el poder; igual el tiro les sale por la culata.
Obiang ya no sorprende a nadie, no tiene nada que ofrecer como no lo ha hecho todo el tiempo que ha permanecido en el poder; sabe perfectamente que él y su familia sin excepción, son el problema de Guinea, el obstáculo para su desarrollo y progreso, y mientras que ellos permanecen al frente del mismo, su hundimiento y descomposición serán inevitables. Los que le acompañan no son más que simples peones de una partida de ajedrez que sólo juega la familia Obiang para su delirio y disfrute a la espera de que la madre naturaleza dicte sentencia irrecurrible según sus leyes con cada uno de ellos empezando por el octogenario moribundo; podéis recurrir a los mercenarios rusos del grupo Wagner, pero vuestro fin está al caer.
Los que habéis sido reconducidos, reafirmados y nombrados; no creáis que vuestros nombramientos obedecen a méritos profesionales, ni a conductas, comportamientos y principios intachables; estáis ahí solo como gendarmes (Obiang), perros policías, polis malos para hacer el trabajo sucio para que la maligna familia de los Obiang se perpetúe en el poder; para ello, atacais a la población, a vuestros parientes para su mayor gloria, por eso vuestra condena será mayor porque hacéis el mal a sabiendas; no tenéis el perdón de Dios. Que siga el saqueo, el expolio y el crimen organizado.
Así lo pienso y así lo digo; ¿qué os parece?