By Fernando Abaga Edjang
Bien, por fin, tal como lo anunciara insistentemente CPDS y según lo publica Diario Rombe, el Fundador ha convocado “su” dialogo, invitando “a todas las fuerzas políticas ecuatoguineanas que viven en el extranjero a que regresen al País, para entrar en este diálogo para que puedan de forma apropiada legalizar sus partidos políticos o, en su defecto, reinsertarse en los legalizados, conforme a las leyes vigentes y obtener la legitimidad necesaria en el aspecto político nacional adquiriendo la consideración de partidos políticos legalizados en Guinea Ecuatorial.”
Me gusta mucho esta frase. Primero, define el papel de las fuerzas políticas ecuatoguineanas que viven en el extranjero”: invitados. Y para ello, el Fundador ha decidido unilateralmente, sin consultar a los “invitados”, dos aspectos muy importantes en cualquiera negociación: a) la fecha y b) el lugar de las negociaciones. Hemos visto recientemente cómo el FRELIMO, en el gobierno, y la RENAMO, en la oposición (armada), en Mozambique negociaban y llegaban a acuerdos en estos aspectos, incluyendo el aspecto de la mediación. En segundo lugar, deja claro que el Fundador organizara “su” dialogo con o sin la participación de los “invitados” de la oposición en el exilio.
En tercer lugar, revela los verdaderos objetivos del dialogo: “…para que puedan de forma apropiada legalizar sus partidos políticos o, en su defecto, reinsertarse en los legalizados, conforme a las leyes vigentes y obtener la legitimidad necesaria en el aspecto político nacional adquiriendo la consideración de partidos políticos legalizados en Guinea Ecuatorial…” NADA MÁS. Nada de transición política, nada de democratizar el país, porque el Fundador entiende que:
“Como principio político, somos conscientes de que el ejercicio de la democracia es incompatible con la exclusión, la intolerancia y la descalificación. Este principio siempre ha guiado nuestra actuación política desde la introducción del Multipartidismo en nuestro País en 1991 hasta la fecha. La Unidad Nacional, la solidaridad, la pluralidad de opiniones y la tolerancia, deben primar siempre a la hora de considerar los temas que afectan al conjunto de la Nación”.
Como espectador, a la espera me quedo para ver a la oposición en el exilio desfilar mansamente hacia el matadero, guiados por una fe ciega en un hombre que nunca ha dicho la verdad en toda su vida, nunca cumple sus compromisos, ha demostrado una y otra vez no tener escrúpulos, ha destrozado a los partidos políticos legalizados, organiza pucherazos en los que gana con más de un 90% de los votos emitidos, está dispuesto a eternizarse en el poder cueste lo que cueste y no les ha consultado en aspectos fundamentales del dialogo al que se les «invita».