Homenaje a Pocho Guimaraes, un tributo a la resistencia y la libertad

El próximo 10 de mayo, Madrid será testigo de un evento cargado de emoción y significado. Se celebrará un homenaje de despedida a Pocho Guimaraes, artista y activista guineoecuatoriano, cuyo legado sigue vivo en los corazones de quienes lo conocieron y en las vidas de aquellos que, a través de su arte, encontraron esperanza en la lucha por la libertad. Este tributo, que nace del cariño y el respeto, ha sido organizado por Kike León, un amigo cercano y compañero de Pocho, que, con mucho amor y gratitud, ha reunido a quienes compartieron su vida y su causa.

El homenaje se llevará a cabo en el espacio Mundo Negro, un lugar con una historia profundamente conectada a África y a las luchas por la justicia. Ubicado en Arturo Soria 101, este espacio especializado en temas africanos es mucho más que una sede; es un lugar donde se han dado citas trascendentales para la cooperación internacional y donde se reconocen las voces que defienden los derechos de los pueblos. Mundo Negro ha abierto sus puertas generosamente para rendir homenaje a Pocho, un gesto que simboliza la solidaridad con Guinea Ecuatorial y su lucha por un futuro más justo.

Kike León, como amigo y compañero de Pocho, se ha encargado de dar forma a este homenaje, una tarea que no solo le honra, sino que le emociona profundamente. Kike sabe que este evento no es solo un recordatorio del arte de Pocho, sino un acto de resistencia, de reafirmar que su memoria no será olvidada, que su lucha sigue viva en aquellos que continúan defendiendo la libertad.

En el evento, participarán varias figuras entrañables que compartieron momentos de lucha y solidaridad con Pocho, como Marcelo Ndong, a quien todos conocen como «el arquitecto». Este apodo, no es solo un título, sino un reflejo de la profunda conexión de Marcelo con las causas sociales, su trabajo incansable con las ONG y su compromiso con la cooperación internacional. Marcelo, a través de su participación en este homenaje, no solo hablará del legado de Pocho, sino que transmitirá la emoción de aquellos que, como él, ven en el arte y la memoria colectiva una forma de resistencia frente a la opresión.

Y no podemos olvidar a Nzé Ramón Esono Ebalé, quien, además de ser un artista de renombre, tenía una relación profunda con Pocho. Esono Ebalé, que en su carrera ha convertido el arte en una herramienta de denuncia, realizará una actuación de performance en el homenaje, una manera única de rendir homenaje a su amigo, a la lucha que ambos compartían y a la resistencia que siempre habían defendido. Su intervención no será solo artística; será un testimonio de amistad, de respeto y de la necesidad de seguir luchando por la libertad, incluso en el exilio.

Este homenaje no es solo un acto en el que se habla de Pocho, es un acto en el que se respira su espíritu. Es un recordatorio de su valentía, de la pasión con la que defendió la justicia y la libertad, de cómo su arte traspasó las fronteras y tocó las fibras más profundas de aquellos que entendieron que el arte, la cultura y la memoria son fuerzas poderosas contra la opresión.

En este evento, se mezclan los recuerdos, las sonrisas, las lágrimas y, sobre todo, el compromiso de seguir adelante, de no olvidar. Pocho nos dejó una enseñanza: que la lucha por la libertad no es solo política, es humana. Es una lucha de todos aquellos que se atreven a alzar la voz, a levantar el puño, a resistir. Y, como no podía ser de otro modo, sus amigos y compañeros lo honran con un homenaje que será, sobre todo, un acto de amor, de recordar lo que hizo, lo que significó, y lo que sigue significando para todos.

Este 10 de mayo, en el corazón de Madrid, los que lo conocieron, los que lo admiraron, y los que luchan por la libertad, se reunirán para celebrar su vida. Porque Pocho, aunque ya no esté físicamente con nosotros, sigue siendo una chispa que ilumina el camino de aquellos que no dejan de pelear por un futuro mejor para Guinea Ecuatorial.