Según fuentes nuestras, Bienvenido Ateba Mangue, actual director adjunto de la flota presidencial, está a un paso de convertirse en el nuevo director general de CEIBA Intercontinental, tras la dimisión de «Agnes«, la expatriada de nacionalidad botswanesa designada por Ofa Mbo. Este movimiento no ha generado sorpresa, pero sí indignación entre quienes conocen el oscuro historial de Ateba Mangue, señalado como uno de los principales responsables del declive de la aerolínea nacional.
Ateba Mangue, conocido por su habilidad para posicionarse en roles estratégicos donde el dinero fluye sin control, no ha dejado de aplicar las mismas tácticas que llevaron a CEIBA al borde del abismo. Actualmente, ha montado lo que fuentes internas describen como una «mini aerolínea» dentro de los recursos de la presidencia, utilizando aviones oficiales para vender billetes en la ruta Bata-Malabo a un precio de 50.000 francos CFA. Este dinero, lejos de beneficiar a la nación, es camuflado como gastos en mantenimiento, piezas o servicios, vaciando las arcas de la flota presidencial al igual que hizo con las de CEIBA.
Las operaciones de Ateba no son casuales ni improvisadas. Fuentes cercanas revelan que siempre coloca a personas de su absoluta confianza en puestos clave, como cajeros que reciben órdenes directas de él y reportan únicamente a su círculo cerrado. Así, todo parece ajustarse a la legalidad mientras los fondos terminan desviados a sus cuentas personales en el extranjero o entregados en efectivo. Esta estructura, que ya destruyó la estabilidad de CEIBA, sigue viva y operativa, con la complicidad de figuras como Tito Gariga y Paco Asumu, quienes han sido sus aliados constantes.
A esto se suma una faceta menos visible pero igual de inquietante: las inclinaciones de Ateba hacia prácticas de control basadas en marabús, a quienes consulta regularmente en Benín, Camerún, Togo y dentro del país. Para quienes han trabajado bajo su mando, estas influencias forman parte de la red de poder que ha cimentado a lo largo de los años.
Mientras tanto, CEIBA Intercontinental ha quedado reducida a una agencia que sirve los intereses privados de quienes la manejan desde las sombras. Los intentos de recuperación de la aerolínea son bloqueados sistemáticamente, ya que cualquier mejora pondría en riesgo el negocio personal que Ateba y su equipo han construido.
De confirmarse su nombramiento, Bienvenido Ateba Mangue no será más que el rostro visible de un sistema que ha saqueado sin escrúpulos una de las empresas del país. El equipo que arruinó CEIBA Intercontinental, con Tito Gariga a la cabeza y apoyado por Bienvenido Esono Engonga y el propio Ateba Mangue, se mantiene intacto. Su posible regreso no augura un futuro mejor para la aerolínea, sino más bien la perpetuación de una decadencia que parece ya irreversible.
