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La investigadora de Estudios Africanos, Ana Lúcia Sá, recordó hoy que la abolición de la pena de muerte en Guinea Ecuatorial era “una condición para la adhesión” a la CPLP que “no se ha cumplido”, pidiendo “coherencia y firmeza” a la organización.
«Es necesario tener en cuenta que se trata de una condición para la adhesión que no se ha cumplido. Por lo tanto, debe haber una posición coherente por parte de la propia institución”, dijo Ana Lúcia Sá a Lusa.
La investigadora del Centro de Estudios Internacionales del ISCTE-IUL y directora del máster de Estudios Africanos ha comentado, a petición de la agencia Lusa, los resultados de la misión de evaluación de la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa (CPLP) desde principios de junio en Malabo. El informe de la misión debería ser analizado por el Comité Permanente de Conciliación la próxima semana.
“Se trataba de una misión dentro del marco institucional y con objetivos claramente definidos de hacer balance del estado de cumplimiento de las condiciones de adhesión. En otras palabras, estaba previsto y tendría que llevarse a cabo, entre otras cosas porque implicaba la adhesión de un país en un marco diferente al de los demás Estados miembros”, señaló.
La misión, que tuvo lugar durante tres días a principios de junio, evaluó el progreso del país en el cumplimiento de sus compromisos de adhesión a la CPLP entre “satisfactorio” y “bueno”.
A pesar de las garantías dadas recientemente al Presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa, por el Ministro de Asuntos Exteriores de Guinea Ecuatorial, Siméon Oyono Esono Angue, y anteriormente por el Presidente, Teodoro Obiang Nguema, a su homólogo caboverdiano, Jorge Carlos Fonseca, de que la pena de muerte será abolida antes de la próxima cumbre de la CPLP, en 2020, durante la misión, las autoridades ecuatoguineanas dejaron claro que sólo se producirá cuando exista “un mínimo de consenso político” sobre el tema.
“Para abolir la pena de muerte es necesaria una revisión del Código Penal que, al igual que en otros países, sigue siendo el código legado por el país colonizador” -en este caso, España, explica la investigadora.
Ana Lúcia Sá señaló que “todavía no ha habido [por parte de Guinea Ecuatorial] una posición coherente sobre si se abolirá o no la pena de muerte” y subrayó que, más que los discursos políticos de presión, a saber, de Portugal y Cabo Verde, se necesita una posición coherente y firme” de la CPLP para señalar este incumplimiento.
“Creo que la institución debería señalar: no se cumplieron las condiciones esenciales para la adhesión, por lo que debería haber una medida firme que esté reconocida en los estatutos de la CPLP (…). Ya han pasado cinco años”, insistió.
Al preguntársele si esta medida podría llegar hasta la suspensión del país como miembro de la organización, Ana Lúcia Sá expresó sus dudas sobre la posibilidad de aplicar “estatutariamente” la suspensión a Guinea Ecuatorial “porque no se interrumpe el orden constitucional en el país”.
“Pero la CPLP tiene este problema en sus manos y debe haber una solución. ¿Cual? No lo sé”, dijo.
Ana Lúcia Sá reconoció, por su parte, que “a pesar de su existencia legal, no ha habido condenas a la pena de muerte desde que se unió a la CPLP”.
Agregó, sin embargo, que varias organizaciones de derechos humanos que trabajan en el país han destacado “la existencia de presos políticos”, poniendo como ejemplo el caso de Joaquín Elo Ayeto, de la plataforma Somos+, “que está detenido sin cargos formales”.
“También hay informes de abusos de las fuerzas policiales, limitaciones a la libertad de expresión y otras prácticas que constituyen violaciones de los derechos humanos”, dijo.
Portugal y Cabo Verde, que actualmente presiden la CPLP, han intensificado su discurso en el sentido de que si quiere permanecer en la comunidad, Guinea Ecuatorial debe abolir la pena de muerte.
Cuando Guinea Ecuatorial se unió a la CPLP como miembro de pleno derecho en la cumbre de Dili en 2014, adoptó una “hoja de ruta para la adhesión” que incluía, entre otras cosas, la adopción del portugués como lengua oficial -junto con el español y el francés- y la abolición de la pena de muerte.
ANGOP ( Agência Angola Pres)