Guinea Ecuatorial está planteándose, en pleno proceso en Francia contra su vicepresidente, Teodoro O Nguema Obiang Mangue (conocido como «Teodorín»), por corrupción y blanqueo de dinero, la presentación de una demanda para que la justicia francesa investigue supuestas conspiraciones contra el país.
El embajador de Guinea Ecuatorial en Francia, Miguel Oyona Ndong Mifumu, explicó a Efe que se trataría de recurrir a la Fiscalía para que investigue las alegaciones de presuntas operaciones para derrocar al presidente ecuatoguineano (y padre de «Teodorín»), Teodoro Obiang,
Dichas alegaciones fueron presentadas el lunes pasado por el mercenario británico Simon Mann ante el Tribunal Correccional de París que juzga a «Teodorín».
Mann, que reconoció ante el tribunal haber trabajado para Obiang tras ser liberado en 2009 (fue indultado tras cumplir una parte de la condena por su participación en un golpe de Estado contra él en 2004) y haber sido remunerado por él para detectar y neutralizar a opositores, habló de nuevas maniobras para derrocar al jefe del Estado en 2011.
El mercenario aseguró que tras esas maniobras estaban algunos de los que él mismo había señalado como participantes en el golpe de Estado frustrado en el que él mismo estuvo implicado en 2004 -el empresario libanés Ely Calil y el líder opositor Severo Moto-.
Pero también el magnate estadounidense Georges Soros y el abogado William Bourdon, que era el presidente de una de una de las ONG que estuvieron en el origen de la investigación contra «Teodorín» en Francia, y es ahora abogado de la acusación particular en nombre de Transparencia Internacional.
Para el embajador «la justicia tiene que investigar esos vínculos«, Además, trató de desacreditar la acusación contra el «número dos» del país al hacer notar que si ahora Severo Moto aparece junto a William Bourdon es que «algo hay«.
El líder opositor, que asiste al proceso entre el público, se quejó en declaraciones a Efe, de que se haya querido desviar la atención de lo que el Tribunal Correccional de París juzga con el testimonio de Mann -que lo hizo a petición de la defensa-, y de que se pretenda así reabrir una cuestión que ya consideró establecida el Tribunal Supremo en España.
«Severo Moto no ha organizado ni ha dado ningún golpe de Estado» porque no tiene capacidad de dirigirlo, ni financiarlo ni de captar mercenarios, dijo en tercera persona antes de subrayar que él promueve una acción política pacífica y que lo que querría es «dirigir (su) país» para proceder a un cambio del actual régimen a otro democrático.
«Cuando escucho al pobre Simon Mann (…) me quedo un poco patidifuso» porque «no sé qué versión de lo que cuenta hay que creer«, comentó en relación a los cambios sucesivos en su relato en los últimos años.
Bourdon tampoco se privó de criticar la estrategia de la defensa al llamar a declarar al mercenario -hoy habló de «métodos nauseabundos«- cuya declaración fue ajena al fondo del proceso contra «Teodorín»
EFE
